La Plataforma 7N contra la violencia machista ha acordado hoy, en su asamblea estatal celebrada hoy en Valencia, extender la atención jurídica, psicológica y social que reciben que reciben las víctimas de violencia de género a las agresiones sexuales sufridas por las mujeres durante las fiestas.
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La convención de Valencia de la Plataforma 7N ha aprobado también desarrollar una campaña contra la violencia sexual en las fiestas, que consideran una manifestación más de la violencia machista por lo que exige respuestas políticas y sociales.
La plataforma ha criticado la limitación de la violencia de género a las relaciones de pareja, tal como recoge la ley contra la violencia de género, ya que, en su opinión, «no abarca toda la realidad, ni aplica los convenios internacionales, que sí contemplan todas las agresiones sufridas por la mujer como consecuencia de los condicionantes socioculturales que la sitúan en una posición de subordinación al hombre».
En ese reconocimiento más amplio de la violencia de género se incluye el maltrato en el seno de las relaciones de pareja, la agresión sexual en la vida social y el acoso en el medio laboral, han resaltado las fuentes.
Las integrantes de esta plataforma han comentado que, afortunadamente, el rechazo a la violencia sexual en las fiestas ha estallado este verano, como ha ocurrido en los Sanfermines y otras muchas ciudades, ya que se han producido «manifestaciones contra las agresiones sexuales y han creado una nueva conciencia social que demanda políticas públicas de prevención y de atención social y judicial».
«Ahora las denunciantes de las agresiones de este verano se enfrentan a probar en el juzgado que no hubo ‘consentimiento’, una dificultad tradicional en la respuesta judicial», han resaltado las fuentes.
Han resaltado que la violencia sexual en las fiestas «es violencia machista o de género, y hay que combatirla con herramientas que castiguen a quienes la ejerzan directamente o indirectamente y que reparen el daño a las víctimas, pero también desarmando su base».
Por todo ello, la Plataforma feminista 7N contra las violencias machistas propone que la atención jurídica, sicológica y social a las víctimas de violencia de género «se extienda también a cada mujer que haya sufrido agresiones sexuales, sea en las fiestas, en las aulas, en el trabajo o en cualquier lugar o relación, asegurándoles atención, protección, justicia y reparación».
Anuncian también que velarán para que las mujeres que se han atrevido a denunciar «no salgan trasquiladas por triquiñuelas judiciales» y para ello piden a juzgados y tribunales que atajen cualquier atisbo de impunidad.
La asamblea ha pedido también al Gobierno central que apruebe un Plan de Acción contra la violencia sexual y un protocolo de actuación rápida que incluya sensibilización social, medidas de prevención, servicios de atención especializada a las víctimas y asistencia letrada y tratamiento judicial especializados.
La plataforma exige igualmente poner en marcha «una educación afectivo-sexual en todas las etapas educativas alejada del modelo heteropatriarcal y basada en el respeto a la igualdad y a la diversidad».

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